Tunja, 6 de junio de 2018. (OPGB)."Me han dicho que por qué semejante esfuerzo para salvar la Espeletia Paipana. Yo les digo que, para mí, y para el futuro del planeta, es más valioso un frailejón vivo, que la riqueza efímera y fácil que pueden dejar los recursos no renovables".
De esta manera, el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, se refirió a la inversión y los esfuerzos por salvar esta especie de frailejón, única en el mundo, y de la cual solo quedan 17 individuos en su hábitat natural, el parque natural municipal Ranchería, en Paipa, del que es endémica.
La declaración la hizo en el marco del Día Mundial del Ambiente, refiriéndose también a la inversión de 550 millones de pesos para viveros ubicados en diferentes provincias, y que tendrán como objetivo principal el estudio científico y la preservación de la flora del departamento, haciendo énfasis en el frailejón ya referido.
Amaya además dijo que los "esfuerzos por salvar esta especie de frailejón, el uso de canastos en lugar de plástico, la defensa del páramo de Pisba, la siembra masiva de árboles y Boyacá Bío, son las fibras con las que estamos armando el tejido social y ambiental para dejarles un planeta mejor a las futuras generaciones".
La amenaza
De acuerdo con la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, UICN, en este momento hay 25.800 especies amenazadas a nivel global, lo que equivale a 1.800 más que en 2016, año en el que la amenaza se cernía sobre 24.000.
Por su parte, el Centro Iberoamericano de la Biodiversidad, sostiene que cada tres horas desaparece una especie de flora o fauna de la faz de la tierra; mientras que el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, afirma que en Colombia 1.203 especies están amenazadas, de las cuales aproximadamente 800 son de flora.
"Estas cifras tan alarmantes nos obligan a actuar desde lo regional. Tratar de recuperar la Espeletia Paipana y el apoyo a viveros es nuestro granito de arena, uno de nuestros aportes a la salvación de la depredación que hoy vive el planeta, y a la cual nos oponemos con proactividad, con acciones como esta. Tratar de salvar una especie es tratar de salvar la vida misma", manifestó de forma contundente el gobernador.
A su vez, el director de Ambiente del Gobierno de Boyacá, Fabio Medrano agregó que: "A inicios de la década del 80 había miles de individuos del frailejón Espeletia Paipana en su hábitat. En 2005 quedaban 250; en el 2014, 26; y hoy solo quedan 17. Por eso es tan importante esta inversión que decidió el gobernador Carlos Amaya. Vamos a contribuir a salvar esta especie de su extinción. Hoy son 550 millones que se destinan para viveros en todo el departamento, con los que se fortalecerá la propagación de especies nativas; pero, sobre todo, las que se encuentran en nuestro ecosistema más importante, nuestro páramo, los frailejones".
"El único gobierno departamental que adelanta acciones para evitar la pérdida de especies nativas, endémicas de su territorio, es el que celebra el 2018, como el Año del Agua y el Ambiente, el de Boyacá. Pero no solo es desde el gobierno, es todo el pueblo unido, campesinos, guardapáramos que cuidan estos ecosistemas, fuentes de agua, como si fueran tesoros", añadió el funcionario.
En este momento, en el vivero de alta montaña ubicado en el santuario de fauna y flora Guanentá Alto Río Fonce, a 3.764 metros sobre el nivel del mar, en jurisdicción de Duitama, existe un trabajo de recuperación, con 34 individuos, que en los próximos meses serán trasplantados a la zona de la que son naturales, es decir, al parque natural Ranchería, en Paipa.
