En el mercado mundial, la granada es una fruta de amplia demanda. (Foto: verdeluz.com.ar)
Por Reinaldo Meneses Quintero
Ingeniero Civil –UN-
Chicamocha News - diciembre de 2021
La región del Chicamocha que comprende los departamentos de Boyacá y Santander tiene un clima particularmente diferente al resto del país. Los aspectos más sobresalientes del clima de esta región son humedad relativa baja, alta radiación solar, luminosidades largas, altas fluctuaciones de temperatura día noche que se traduce en un clima denominado por este servidor como mediterráneo sin estaciones, pues estamos ubicados en el trópico, en donde solo tenemos estaciones de verano y temporadas de lluvias que normalmente son más bajas que el promedio nacional.
En general, tenemos un clima más cálido que el resto del país, a tal punto que las temperaturas son notablemente más altas que en los demás territorios a la misma altura sobre el nivel mar, esto se manifiesta, por ejemplo, en el municipio de Capitanejo, que a pesar de estar a 1.100 msnm figura entre las diez poblaciones con mayores registros de temperatura en Colombia. A raíz del cambio climático, que nos afecta a todos por igual, esta particularidad se ha acentuado aún más.
Ya habíamos mencionado que esta singularidad es un problema para nuestros campesinos si persistimos en modelos productivos tradicionales, pero puede llegar a ser una ventana de oportunidades si se sabe sacar ventaja con modelos productivos diferentes e innovadores.
En estos tiempos tan difíciles no podemos abandonar nuestros cultivos que nos aseguran la soberanía alimentaria, como son ganadería, maíz, frijol, verduras, tubérculos, etc., pero como nuestro principal problema es la pobreza del sector rural, debemos mirar e implementar proyectos de alta rentabilidad que nos permitan superar esta situación, y qué mejor que los frutales que se han tornado en un renglón de alto crecimiento, tanto en demanda como en buenos precios, pero debemos decantarnos por frutales que sean rentables, ya sea porque tienen muy buen precio en el mercado internacional, o porque son factibles de producir exitosamente en nuestros climas y suelos.
Recientemente, una empresa exportadora denominada Frutas Comerciales esta incursionando con proyectos en nuestra región, tratando de replicar el éxito logrado en otras regiones del departamento y la Nación. El Ingeniero Agrónomo Rubén Carvajal Caballero, con el apoyo del SENA regional, ha venido haciendo ajustes tecnológicos al cultivo de las pasifloras para que sean una alternativa rentable en nuestra región del Chicamocha, en un clima con las particularidades ya mencionadas y para el que es difícil sembrarlas.
El ajuste tecnológico que mencionamos aquí se refiere a adaptar algunas de estas especies a nuestras condiciones edafoclimáticas y tratar de ampliar la franja de alturas en las que se puedan sembrar.
Pero como ya se había mencionado anteriormente, nuestro clima permitiría implementar otros cultivos también muy rentables que no se pueden sembrar en el resto del país y que aquí sí se acomodarían mediante ajustes tecnológicos. Estos ajustes tecnológicos a los que nos referimos serían entre otros, programaciones, podas, invernaderos, etc., en algunos casos solo implica adquirir las variedades o especies que sean más productivas y adaptables en la escala de clima que se requiera.
Mencionaremos aquí algunas de las especies diferentes a las pasifloras que pueden ser alternativa para nuestra agricultura tradicional, como es el caso de la Granada, Dátil, Uva de mesa, sin embargo, pueden ser muchas más y corresponde a los profesionales del agro identificarlas y ver su viabilidad económica para nuestro clima.
GRANADA (Punica granatum)
En la búsqueda de cultivos alternativos para la región del Chicamocha y en particular para la provincia de García Rovira, encontramos en el granado una alternativa productiva que no la habíamos visto y que es una especie con gran potencial para nuestra agricultura. Hay ejemplares en los solares y fincas de la región con más de 50 años, abandonados y aún productivos, demostración de que la región cuenta con condiciones agroecológicas muy favorables para adelantar cultivos de granada. En el mercado mundial es una fruta de amplia demanda, pues las últimas investigaciones han demostrado que es un fruto rojo con características muy favorables para la salud humana y algunos países están aprovechando estas propiedades para posicionarse en el mercado.
DÁTIL (Phoenix dactylifera)
La palma datilera es una especie procedente del Oriente Medio, muy apreciada por su potencial alimenticio, lo que hace que sea muy apreciada por las tribus de estas regiones que la incluyen en su dieta alimenticia por su fácil disposición y conservación. Se adapta muy bien a los ambientes tropicales semidesérticos, en suelos no muy fértiles. Por tener el cañón del Chicamocha climas y suelos con estas características, pensaríamos que podría ser un cultivo con potencial para nuestra región.
El municipio de Soatá, en el departamento de Boyacá, ubicado en esta región, se denomina la capital datilera de Colombia, sin embargo, la variedad que allí se cultiva es de baja calidad y se requiere un proceso de transformación que incluye cocido y adición de azúcar para su comercialización como alimento, muy típico de la zona.
La propagación por semilla produce plantas tanto masculinas como femeninas y las masculinas son improductivas por lo que este tipo de propagación no es rentable, la alternativa viable es la propagación in vitro para lo que se requieren ejemplares femeninos productivos de variedades de alta demanda que ya existen en el valle del Chicamocha. El gremio de la palma de aceite que en el país cuenta con un centro de investigación que la propaga in vitro, ya tiene esta tecnología y el Doctor Rodrigo Ávila, de Cenipalma, ofreció sus servicios profesionales como genetista para este tipo de propagación, siempre y cuando se tenga un laboratorio. El Doctor Henry Vanegas como director de FENALCE logró que la Universidad Nacional nos facilite su laboratorio de in Vitro, se requieren sólo los reactivos necesarios, por lo que creemos que están todos los elementos necesarios para obtener plántulas para implementar cultivos de dátil comercial en la región.
UVA DE MESA (Vitis vinífera)
En la región del Chicamocha hay algunas experiencias que han probado con el cultivo de uva de mesa en nuestra región, casos como los del municipio de Covarachía en Boyacá, que tiene los mismos climas, nos motivan a tomar iniciativas en este sentido, corrigiendo o mejorando las variables que en su caso han sido las que quitan rentabilidad. Una de estas es la variedad con la que cuentan ellos (Isabella), de muy bajo valor en el mercado y aún deja rentabilidad, la variedad que se plantea es la Red Globe que se denomina chilena por su procedencia. Esta variedad permite rendimientos mayores que la Isabela y, como es sabido, tiene un precio de mercado de al menos el doble, lo que garantiza una rentabilidad mucho mayor haciendo viable la iniciativa. Ya se está probando con esta variedad en Capitanejo al parecer con buenos resultados.
Las experiencias con los cultivos del valle del cauca han sido exitosas, con un paquete tecnológico ya probado lo que permitiría replicarlo en nuestra región con los ajustes y modificaciones a que haya lugar, para esto se solicita el concurso de profesionales de esta región del país, especialmente del Doctor Oswaldo Puerto, gestor de muchos de estos proyectos y profesional con probada experiencia en este cultivo.
La uva, por ser una especie caducifolia proveniente de climas de estaciones, renueva hojas y ramas en el invierno, nosotros al carecer de este tipo de estaciones debemos programar defoliaciones y aplicar productos compensadores de frío como cianamida hidrogenada, con esta técnica en Valle del Cauca logran obtener casi tres cosechas al año, contrario a Chile o California (EEUU) que solo obtiene una, razón demás para creer que sería un cultivo muy rentable, en nuestro caso se esperaría al menos 2 cosechas al año, pero probablemente se obtendría una fruta de muy buena calidad.
OTRAS ESPECIES
Especies tipo caducifolios serían fácilmente adaptables a nuestros climas, ya se probó con el durazno que es un cultivo muy productivo en nuestras tierras, el problema surgió cuando llegó la mosca del mediterráneo (Ceratitis capitata) que impide certificar fincas exportadoras y solo atienden el mercado nacional muy deprimido por la sobreoferta, perdiéndonos precios internacionales de probablemente el triple del nacional. Hablamos de especies como manzana, pera, ciruela etc., que por ser programables aprovecharemos precios de ventanas en las que en los países de estaciones no pueden producir, Colombia las importa a precios muy altos.
El mensaje es que sin descuidar nuestra soberanía alimentaria implementemos cultivos de frutales que tengan mercado internacional, para que nuestros campesinos se tornen en empresarios del campo con ingresos suficientes para suplir holgadamente sus necesidades básicas, más ahora que un municipio de nuestra provincia fue declarado deshonrosamente en situación crítica en cuanto a seguridad alimentaria.